2ª de S. Juan
"Dama elegida", "Señora". Así saluda Juan a la comunidad de no sabemos
qué ciudad. Elegida y santa es al Iglesia, como son elegidos de
Dios y santos los que la integran.
Juan los invita a una actitud muy firme y tajante frente a los
que no aceptan la fe de los apóstoles. Al mismo tiempo recuerda
la ley fundamental del cristiano: el amor.
Permanecer celosamente fieles a la verdad es amar a Cristo, que
nos confió esta verdad, es servir a los hombres, que necesitan
toda la verdad y no solamente la que más se aprecia en un momento
determinado.
Salutación
1 El anciano a la señora elegida y a sus hijos, a quienes
yo amo en la verdad; y no sólo yo, sino también
todos los que han conocido la verdad,
2 a causa de la verdad que permanece en nosotros, y estará
para siempre con nosotros:
3 Sea con vosotros gracia, misericordia y paz, de Dios Padre y
del Señor Jesucristo, Hijo del Padre, en verdad y en amor.
Permaneced en la doctrina de Cristo
4 Mucho me regocijé porque he hallado a algunos de tus
hijos andando en la verdad, conforme al mandamiento que recibimos
del Padre.
5 Y ahora te ruego, señora, no como escribiéndote
un nuevo mandamiento, sino el que hemos tenido desde el principio,
que nos amemos unos a otros.
6 Y este es el amor, que andemos según sus mandamientos.
Este es el mandamiento: que andéis en amor, como vosotros
habéis oído desde el principio.
7 Porque muchos engañadores han salido por el mundo, que
no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Quien esto hace
es el engañador y el anticristo.
8 Mirad por vosotros mismos, para que no perdáis el fruto
de vuestro trabajo, sino que recibáis galardón completo.
9 Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina
de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de
Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo.
10 Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo
recibáis en casa, ni le digáis: ¡Bienvenido!
11 Porque el que le dice: ¡Bienvenido! participa en sus
malas obras.
Espero ir a vosotros
12 Tengo muchas cosas que escribiros, pero no he querido hacerlo
por medio de papel y tinta, pues espero ir a vosotros y hablar
cara a cara, para que nuestro gozo sea cumplido.
13 Los hijos de tu hermana, la elegida, te saludan. Amén.
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